UN BREVE EXTRACTO DEL LIBRO.

"En la sociedad actual, casi todas las personas llevan una vida muy estresante, además tienen que enfrentarse a demasiados  problemas que les vapulean constantemente. Es evidente que determinadas situaciones existenciales todavía vienen dotadas de un mayor incremento de estrés. Este nivel de estrés es producido esencialmente por diversos factores, entre otros: las indudables dificultades económicas, los conflictos laborales, las enfermedades graves, los divorcios, las catástrofes naturales, las muertes de los seres queridos, etc. Es aconsejable tomarte un lapso de tiempo para aislarte de la realidad con el fin de acostumbrarte al “oxígeno místico” y prenderte en la fuente divina. Debes permitirte un espacio para meditar regularmente y  disfrutar de  los beneficios que  la meditación  te otorga. Una  vez te hayas centrado en el proceso y acompañado de  las beneficiosas energías renovadoras del aliento divino, entonces retornarás con otra visión a tu realidad diaria. Cuándo te prendes en la espiritualidad las situaciones providenciales te empiezan a suceder y realmente percibirás tu vida desde una nueva perspectiva holística. Un buen ejemplo a seguir sería el recordar cómo el maestro Jesús necesitaba aislarse del mundo y en determinadas ocasiones se marchaba  a los cerros a orar.

Existen muchas maneras de prenderte en la parte espiritual, aunque reconozco que al principio, si no estás acostumbrado, quizá te cueste un poco. En el libro te daré algunas pautas para realizarlo de una forma fácil y amena. Es indudable que a través de los sueños, diariamente conectamos con nosotros mismos y con el mundo espiritual. También por medio de la meditación, la oración, la visualización, los decretos metafísicos, la música, las asociaciones de ayuda a otras personas, las relaciones interpersonales saludables y, por supuesto, la introducción consciente de la presencia celestial en nuestro mundo íntimo.

La auténtica conexión con la divinidad nos ofrece la posibilidad de apreciar cómo en la vida empiezan a sucedernos ciertas pistas o señales que al final se revelan como indudables “milagros”. Si prestamos la oportuna atención, comprobaremos que las casualidades (de azar), empiezan a aparecer en nuestra vida y son similares significativamente con las causalidades (de causa y efecto). El proceso intuitivo surge repentinamente en la conciencia mediante una imagen o una idea envuelta por las chispas de la intuición. El individuo siente el resplandor intuitivo como una sacudida íntima e intensa y transcurre en un tiempo fugaz. Es algo parecido al temblor de un volcán interno que indicase una señal sobre algún conflicto psíquico, y donde simultáneamente aparece en el exterior un nuevo acontecimiento pero que viene provisto del mismo significado o análogo, es decir entramos de lleno en el concepto de sincronización ..."

© Amparo Ga. Prendida en la luz. 2015. © Uso / o duplicación no autorizada de este material sin el permiso expreso y por escrito del autor de este sitio/ y o propietario está estrictamente prohibido.